Espanhol da Espanha
|
Espanhol da América Latina
|
Tradução ao Português
|
Acera
|
vereda (Arg.)
|
calçada, passeio
|
Aguacate
|
palta / aguacate
|
abacate
|
Alquilar
|
rentar (Mex.)
|
alugar
|
Alquiler
|
renta (Mex. e e Chile)
|
aluguel, ou aluguer (em Portugal)
|
Apressurar
|
apurar
|
apressar
|
Arcén
|
banquina (Arg. e Urug.)
|
acostamento, berma da estrada
|
Ascensor
|
elevador
|
Elevador
|
Calabaza
|
zapallo / ayote (Méx e Amér. Central)
|
Abóbora
|
Calabacín
|
chilacayote (Méx e Amér. Central)
|
abobrinha, courgette
|
coche (automóvil)
|
auto / carro (automóvil)
|
carro (automóvel)
|
Coger
|
tomar / agarrar / sujetar
|
pegar, segurar
|
Chaval
|
chavo (Méx.) / pibe (Arg.)
|
rapaz, garoto, menino, moço, miúdo
|
Chofer
|
conductor
|
motorista
|
eh / ey / oye
|
che (Arg.) / oye / eh
|
ei / aê / aí
|
móvil (teléfono)
|
celular (teléfono)
|
celular (telefone), telemóvel
|
Ordenador
|
computadora / computador
|
computador
|
Papá Noel
|
Santa Claus (Méx e Amér. Central) / Viejito Pascuero (Chile) / Papá Noel
|
Papai Noel, Pai Natal
|
Prisa
|
apuro
|
pressa
|
Puchero
|
olla
|
panela
|
Vídeo
|
video
|
vídeo
|
zapatillas (deportivas)
|
tenis
|
tênis, ténis (calçado)
|
quarta-feira, 10 de outubro de 2012
Diferenças no Espanhol
REGLAS DE PUNTUACIÓN Y ACENTUACIÓN EN ESPAÑOL
LOS SIGNOS ORTOGRÁFICOS. REGLAS DE PUNTUACIÓN Y ACENTUACIÓN EN ESPAÑOL
Teoría: Los signos ortográficos nos permiten indicar en la escritura la pronunciación de las palavras (tilde, diéresis), la entonación (exclamación, interrogación), las pausas de la frase (punto, coma, punto y coma...), etc. haciendo más fácil y ágil la lectura de los textos y, por tanto, su comprensión.
Una redacción no es correcta si se usan inadecuadamente los signos ortográficos, y en especial los signos de puntuación.
SIGNOS Y REGLAS DE PUNTUACIÓN
Aunque en español existe un gran número de reglas de puntuación, aquí sólo vamos a estudiar las más básicas y generales. Cuando escribáis vuestras composiciones, yo os señalaré la puntuación correcta de aquellos casos especiales que no estén aquí descritos.
1. El punto .
a. El punto y seguido: termina una frase con sentido completo y separa enunciados que integran un párrafo. Después de un punto y seguido se continúa escribiendo en la misma línea.
b. El punto y aparte: separa dos párrafos distintos. Después de un punto y aparte, se escribe en una línea distinta. La primera línea del nuevo párrafo debe tener un margen mayor que el resto de las líneas que lo componen.
c. El punto final: es el que cierra un texto.
Ej.: El mar estaba embravecido aquel día. (punto y seguido) Los barcos bailaban sobre el agua sorteando las olas con dificultad. (punto y aparte)
Miguel, sentado en el muelle, esperaba el regreso de su padre. (punto y seguido) Atisbaba el horizonte buscando ansioso su barco con la mirada.
(punto final)
d. Detrás de las abreviaturas:
Ej.: Sr., Sra., Exmo.
Se suele escribir también con las siglas (C.S.I.C. = Centro Superior de Investigaciones Científicas); aunque la tendencia actual es no ponerlo cuando las siglas no se forman con la primera letra de cada una de sus palabras (AVIACO).
2. La coma ,
a. Separa las partes de una enumeración o serie dentro de una oración; incluídos miembros gramaticalmente equivalentes dentro de un mismo enunciado, a excepción de los casos em los que medie alguna de las conjunciones y, e, ni, o, u (sólo se pondrá coma delante de estas
conjunciones para evitar confusiones):
Ej.: Vimos elefantes, leones, tigres, jirafas...
Están ocupadas las habitaciones número 28, 55, 134 y 572.
Estaba preocupado por su familia, por su trabajo, por su salud.
Corre las cortinas, cierra las ventanas, apaga las luces y echa la llave.
b. Cuando se cambia el orden regular de las partes de una oración, anteponiendo elementos que suelen ir pospuestos, se coloca una coma después del bloque anticipado:
Ej.: Te compraré el caramelo si me dices la verdad. (Orden regular, no
escribimos coma) Si me dices la verdad, te compraré el caramelo. (Se antepone la condicional, escribimos coma)
Escríbenos una carta cuando llegues. (Orden regular, no escribimos
coma)
Cuando llegues, escríbenos una carta. (Se antepone la temporal,
escribimos coma)
c. Separa los incisos, las explicaciones que pueden aparecer en una oración:
Ej.: Llegó Luis, el novio de Mónica, y nos invitó a todos a cenar.
Cervantes, quien es un gran escritor español, vivió enValladolid.
Tiene sólo quince años, es decir, aún no es mayor de edad.
d. Para indicar la omisión de un verbo:
Ej.: Juan Manuel ha comprado la casa; Marta, los muebles.
Joaquín es policía nacional; Ana, graduada social.
3. El punto y coma ;
a. Separa los elementos de una enumeración cuando se trata de expresiones complejas que incluyen comas o son demasiado extensos:
Ej.: La chaqueta es azul; los pantalones, grises; la camisa, blanca; el
abrigo, negro.
b. Separa oraciones no unidas por preposiciones cuando en ellas se ha empleado la coma (también se podría optar por el punto y seguido):
Ej.: La situación económica de la empresa, agravada en los últimos
tiempos, era preocupante; se imponía una acción rápida y contundente
si se deseaba salvar los puestos de trabajo.
4. Los dos puntos :
a. Preceden a una enumeración:
Ej.: Tres son las provincias de Aragón: Huesca, Zaragoza y Teruel.
b. Preceden a las citas textuales:
Ej.: Las palabras del médico fueron: “Reposo y una alimentación
equilibrada”.
c. Detrás de las fórmulas de saludo en las cartas y documentos. La palabra que sigue a los dos puntos se escribe con mayúscula y en un renglón aparte:
Ej.: Querido amigo:
Te escribo para...
d. Antes de la frase en la que se recogen las conclusiones, causas, consecuencias, etc., o se resume lo expuesto con anterioridad:
Ej.: Suspendieron todos los preparativos, anularon las invitaciones, se lo
comunicaron a sus padres y a los amigos más cercanos: no se casarían
ese año.
5. Los puntos suspensivos ...
a. Al final de enumeraciones o enunciados incompletos:
Ej.: Puedes hacer lo que te apetezca: leer, ver la televisión, escuchar
música...
Fue todo muy desagradable... No quiero seguir hablando de ello.
b. Para expresar duda, temor, emoción, etc.:
Ej.: Iré, no iré... Debo decidirme pronto.
c. Se usan entre corchetes para indicar la omisión de parte de un texto copiado literalmente:
Ej.: Al salir el marido le dijo la falsa mujer a la buena esposa que, [...], buscaría a algún hombre que supiera hacer algún encantamiento com que su marido perdiera la mala voluntad que le estaba mostrando.
6. Los signos de interrogación ¿ ? y exclamación ¡ !
Notad que en español hay dos, uno que inicia la frase (¡ ¿) y otro que la cierra (! ?):
Ej.: ¿Comiste ayer en casa?
¡Qué magnífica pintura!
Si no responde al teléfono, ¿qué hacemos?
Estos signos pueden aparecer seguidos por coma, punto y coma o puntos suspensivos, pero nunca de punto y deben colocarse donde empiece la exclamación o la pregunta:
Ej.: Pero tú, ¿cuántos años tienes tú?
7. Los paréntesis ( )
a. Introducen aclaraciones:
Ej.: El abuelo de Alberto (en su juventud fue un brillante cirujano) parecia una estatua sentado en aquel sillón.
El año de su nacimiento (1616) es el mismo en el que murió Cervantes.
8. Los corchetes [ ]
a. Enmarcan los incisos dentro de un período que ya va entre paréntesis:
Ej.: Una de las últimas novelas que publicó Benito Pérez Galdós (algunos estudiosos consideran su obra Fortunata y Jacinta [1886-87] la mejor novela española del siglo XIX) fue El caballero encantado (1909).
b. Enmarcan los puntos suspensivos para indicar la omisión de parte de un texto copiado literalmente.
Ej.: Le sonreí para decírselo; pero después pensé que él no pudo ver mi
sonrisa [...] por lo negra que estaba la noche.
9. La raya —
a. Introduce aclaraciones (como el paréntesis):
Ej.: Esperaba a Emilio —un gran amigo—. Lamentablemente, no vino.
b. Señala cada una de las intervenciones en un diálogo:
Ej.: —¿Deberíamos hablar con él? —preguntó Juan—. Es el único que no lo sabe.
—Sí —respondió la secretaria—, pero no podemos decirle toda la verdad.
10. El guión -
a. Se utiliza cuando es necesario hacer divisiones dentro de una palabra o para unir dos números y no se escribe entre espacios en blanco:
Ej.: luso-japonés, teórico-práctico
1936-37, 1567-1572
11. Las comillas “ ” « »
a. Para reproducir citas textuales:
Ej.: Sus palabras fueron: “Por favor, el pasaporte”.
b. Para citar títulos de artículos, poemas, cuadros, lugares...
Ej.: Nos leyó en voz alta el poema “Romance sonámbulo” de García
Lorca.
12. La diéresis (
a. Se sitúa sobre la vocal u en las combinaciones gue y gui para indicar que la vocal
u debe pronunciarse:
Ej.: cigüeña, pingüino
b. Se sitúa sobre la primera vocal de un diptongo en textos poéticos para indicar que tal diptongo no existe y que el verso cuenta con una sílaba más:
Ej.: El dulce murmurar deste rüido
13. El asterisco *
a. Como signo de llamada de nota al margen o a pie de página dentro de un texto; em ocasiones puede aparecer encerrado entre paréntesis:
Ej.: La novela fue escrita por García Márquez* un año antes de que se le concediera el Nobel de Literatura.
CATEGORÍAS GRAMATICALES
CATEGORÍAS GRAMATICALES
En español contamos con nueve clases de palabras, también llamadas categorías gramaticales:·
SUSTANTIVOS. Son palabras que tienen función principal propia; nos sirven para nombrar seres o cosas. Se dividen en propios, cuando distinguen a una persona, cosa o entidad, de las demás de su misma especie o agrupación (Cicerón, Juan, González, Guadalajara, Argentina, Mediterráneo, manzana); comunes, cuando se generalizan los elementos de una misma especie (niño, perro, país, río, fruta); concretos, cuando hablamos de una entidad real y palpable (silla, televisión, salón, cielo); y abstractos, aquellos que se refieren a pensamientos o cualidades no palpables (paz, belleza, maldad, amor, rencor).
· ADJETIVOS. Son palabras que modifican directamente al sustantivo. Se dividen en calificativos cuando agregan una cualidad (niño inteligente; lobo salvaje; éstos, a su vez, se dividen en explicativos y especificativos) y determinativos, cuando limitan la extensión del sustantivo y se expresan a partir de pronombres (segundo año; pocas manzanas; algunas personas).·
VERBOS. El verbo es, junto con el sustantivo, una categoría principal propia que funcionalmente indica acción. Desde el punto de vista sintáctico se dividen en copulativos, cuando se enlazan al sujeto con un predicado nominal (Juan está de vacaciones; María es inteligente); transitivos, cuando la acción del sujeto recae en un objeto directo (Daniel compra chocolates; Laura tiene hambre); intransitivos, responden a las preguntas ¿cómo?, ¿cuándo?, ¿dónde? (el examen será el viernes; María fue al parque); reflexivos, cuando el sujeto y el objeto son la misma persona o cosa (Lucia se baña); recíprocos, indican reciprocidad (Laura y Miguel se aman); e impersonales, no hay sujeto que realice la acción, y por lo general, se usan en tercera persona (hace mucho frío; llueve todas las tardes).·
ADVERBIOS. Son palabras que modifican al verbo, al adjetivo e, incluso, a otro adverbio; se dividen en adverbios de tiempo (hoy, ayer, mañana, ahora, antes, después, entonces, luego, tarde, temprano, pronto, cuando, siempre, nunca, jamás, ya, mientras, aún, todavía ―llegó ayer―); lugar (aquí, ahí, allí, acá, allá, acullá, cerca, lejos, donde, adonde, dentro, fuera, arriba, abajo, adelante, encima, atrás ―aquí vivo―); modo (bien, mal, como, cual, así, apenas, duro, despacio, alto, bajo, excepto, salvo, buenamente, malamente ―estoy muy cansado―); cantidad (mucho, poco, muy, casi, harto, bastante, tanto, cuanto, nada ―más caro―); comparación (tan, más, menos, mejor, peor ―muy grande―); afirmación (sí, cierto, ciertamente, verdaderamente, también ―sí llega hoy―).·
ARTÍCULOS. Tienen la misma función que los adjetivos: modificar al sustantivo. Se dividen en definidos (el, la, los, las) e indefinidos (un, uno, una, unos, unas).· PRONOMBRES. Se trata de palabras que no tienen función propia; se caracterizan por sustituir al sustantivo sin representar a personas determinadas. Éstos se dividen en personales (yo, nosotros, nosotras, tú, ustedes, él, ella, ellos, ellas); demostrativos (este, ese, aquel); posesivos (mío, tuyo, suyo) y relativos (que, quien, cual, cuyo).·
PREPOSICIONES. Son unidades dependientes que sirven para modificar o complementar sustantivos, verbos, adjetivos y adverbios (la mochila de mi hermano; llegó desde el viernes; está con María; voy a la escuela). Las preposiciones en español son: a, ante, bajo, cabe, con, contra, de, desde, durante, en, entre, hacia, hasta, mediante, para, por, según, sin, sobre, tras.·
CONJUNCIONES. Son unidades dependientes que sirven para enlazar palabras y frases (Juan y Pedro; la escuela o el trabajo); sustantivos (México y Brasil), adverbios (tarde como muchos); y verbos (compra y vende refacciones). Se dividen en copulativas (y, e, ni, que); disyuntivas (o, u); adversativas (pero, mas, que, sino); condicionales (si, como, con tal que, siempre que, dado que, ya que); causales (porque, pues, pues que, puesto que, supuesto que); comparativas (como, así, así como); finales (para que, porque, a fin de que) y deductivas (con que, luego, pues, por consiguiente).·
INTERJECCIONES. Se trata de sonidos articulados con los cuales expresamos algún estado de ánimo, admiración, dolor, alegría, entre otros, y que en su mayoría equivalen a una expresión comunicativa completa; mencionemos como ejemplo: ¡ay!, ¡uf!, ¡hey!, ¡guau!, ¡súper!, ¡ba!.
Alfabeto Gráfico y fónico de la Lengua Española
Alfabeto Gráfico y fónico de la Lengua Española
A – a - Tiene el mismo sonido del português /a/ Ejemplo: casa
B - be larga - Tiene el mismo sonido del português /b/ Ejemplo: baloncesto
C - ce - Puede tener sonido de /ss/ generalmente entre vocales o /k/ en início de una palabra o cuando viene antes de otra consonante Ejemplo: cocina /kossina/ pacto /pakto/ accidente /akssidente/
CH - che - Tiene sonido de /tche/ junto a cualquier de las consonantes Ejemplo: choripan /tshoripã/ chiste /tshiste/ chancleta /tshanklêta/
D - de - Tiene sonido suave como /de/ del português. Cuando acompañado de i NO puede tener ruido /diferente/
E – e - Siempre como vocal cerrada, mismo que tenga acento en la sílaba /ê/ ejemplo: café /kafê/
F – efe - Tiene el mismo sonido del português /f/ Ejemplo: farmacia
G - ge - Acompañado de a-o-u /ga-go-gu/ tiene el mismo sonido del português. Ya com e-i tiene sonido de /rr/ como en gente y gimnasio /rente/ y /rimnasio/
H - hache - No tiene sonido. Es una vocal muda. Ni importa su localización en la palabra. OBS: Junto a la C , el H se convierte en una letra. (CH)
I - I - Tiene el mismo sonido del portugués /tía/
J – jota – siempre tiene sonido de /rr/ Ejemplo: jamón /rramon/ Júpiter /rrupiter/ ajedrez /arredres/ jipe /rripe/
K – ka - tiene el mismo sonido del portugués /k/
L – ele - tiene el mismo sonido del portugués /l/ No debe ser confundido con /u/ em médio y final de palabra. Ejemplo: nível /nibel/, saltar /saltar/
LL – elle - por indicación de la Real Academia Española – RAE solo puede tener sonido de /lh/ lluvia /lhubia/ calle /kalle/, pero en la frontera sucede una variante lingüística llamada yeísmo, cuando en el comienzo o medio de palabra, puede admitir el sonido de /dj/ lluvia /djubia/ calle /kadje/
M – eme - tiene el mismo sonido del portugués /m/: OBS: Entre la m y la n es necesario diferenciar, pues en español solo existen palabras con la m en el final en algunos extranjerismos o latinismos: memorandum, referendum, curriculum, ítem, álbum, zum, auditórium
N – ene - tiene el mismo sonido del portugués /n/
Ñ – eñe - tiene el sonido del portugués /nh/ niño /ninho/ añoranza /anhorãnza/
O – o - Siempre como vocal cerrada, mismo que tenga acento en la sílaba /ô/ ejemplo: próximo /prôkssimo/
P – pe - tiene el mismo sonido del portugués /p/ puerto /puerto/
Q – cu - tiene el sonido del portugués /k/ queso /kêso/ quiosco /kiôsko/
R – ere – en el medio y final de palabra es más suave /r/ caro /karo/ ayudar /aiudar/, pero en comienzo de palabra, tien un sonido más vibrante, casi como la doble erre /rr/ raro /rraro/
RR – erre – tiene sonido vibrante siempre /rr/ carro /karro/ correr /korrêr/
S – ese - en el medio y en final de palabra es más suave /s/ acostarse /akostarse/ pies /piês/, pero en comienzo de palabra o entre vocales, tiene un sonido más vibrante, casi como la doble ese del portugués /ss/ super /ssupêr/ casi /kassi/
T – te - Tiene sonido suave como /t/ del portugués. Cuando acompañado de i no puede tener ruido: títere /títere/
U – u - tiene el sonido del portugués /u/ Uruguay /uruguai/
V – ve corta - Tiene el mismo sonido del português /b/ Ejemplo: vacuna /bacuna/ verano /verano/
W – ve doble – Puede admitir dos sonidos: /u/ en palabras de origen inglesa wisk /uisk/ o también /b/ en palabras de origen alemana o visigoda: wagneriana /vagneriana/
X – equis – Puede admitir diferentes sonidos. Entre vocales y en final de palabra el sonido es de /ks/ taxi /taksi/ torax /tôraks/ y en otros momentos el sonido es de /s/ xilófono /ssilôfono/ excelente /esselênte/
Y – i griega - por la Real Academia Española – RAE solo puede tener sonido de /i/ ley /lêi/ yerba /iêrba/ cayendo /kaiendo/, pero en la frontera sucede una variante lingüística llamada yeísmo, cuando en el comienzo o medio de palabra, puede admitir el sonido de /dj/ yerba /iêrba/ cayendo /kaiendo/. Ya en en final de palabra sigue la definición de la RAE /i/ ley /lêi/
Z – zeta – En início de palabra y en medio de vocales puede tener un sonido más fuerte, semejante al /ss/ zanahoria /ssanaôria/ cozer /kosser/ y un sonido más suave en otros casos: ajedrez /arredrez/ Cuzco /kuzko/
¿Castellano o español?
Esta lengua también se llama castellano, por ser el nombre de la comunidad lingüística que habló esta modalidad románica en tiempos medievales: Castilla. Existe alguna polémica en torno a la denominación del idioma; el término español es relativamente reciente y no es admitido por los muchos hablantes bilingües del Estado Español, pues entienden que español incluye los términos valenciano, gallego, catalán y vasco, idiomas a su vez de consideración oficial dentro del territorio de sus comunidades autónomas respectivas; son esos hablantes bilingües quienes proponen volver a la denominación más antigua que tuvo la lengua, castellano entendido como ‘lengua de Castilla’.
En los países hispanoamericanos se ha conservado esta denominación y no plantean dificultad especial a la hora de entender como sinónimos los términos castellano y español.
Renunciar al término español plantearía la dificultad de reconocer el carácter oficial de una lengua que tan abierta ha sido para acoger en su seno influencias y tolerancias que han contribuido a su condición. Por otro lado, tanto derecho tienen los españoles a nombrar castellano a su lengua como los argentinos, venezolanos, mexicanos, o panameños de calificarla como argentina, venezolana, mexicana o panameña.
terça-feira, 11 de setembro de 2012
sexta-feira, 13 de julho de 2012
sexta-feira, 15 de junho de 2012
Alunos do DH aprendendo sobre Dom Quijote
ALUNOS DA TURMA 82 DA ESCOLA DOM HERMETO, EM ATIVIDADE EXTRA CLASSE, NA DISCIPLINA DE LÍNGUA ESPANHOLA, COM O PROFESSOR KLÉBER BERNY. EM PAUTA: EL INGENIOSO HIDALGO DON QUIJOTE DE LA MANCHA E SUA IMPORTANTE FORÇA NO CRESCIMENTO DA LÍNGUA ESPANHOLA NO MUNDO.
Dom Quixote
El ingenioso hidalgo Don Qvixote de la Mancha
Dom Quixote
Facsímile da primeira edição de Dom Quixote
Autor (es) Miguel de Cervantes y Saavedra
Título em Portugal Dom Quixote[1]
Título no Brasil Dom Quixote
País Espanha
Editor Francisco de Robles
Lançamento 1605
Edição portuguesa
Tradução anônimo[2]
Lançamento 1794
Edição brasileira
Tradução Almir de Andrade
Milton Machado[3]
Editora Livraria José Olympio Editora
Lançamento 1952
Dom Quixote de La Mancha (Don Quijote de la Mancha em castelhano) é um livro escrito pelo espanhol Miguel de Cervantes y Saavedra (1547-1616). O título e ortografia originais eram El ingenioso hidalgo Don Qvixote de La Mancha, com sua primeira edição publicada em Madrid no ano de 1605. É composto por 126 capítulos, divididos em duas partes: a primeira surgida em 1605 e a outra em 1615.
O livro surgiu em um período de grande inovação e diversidade por parte dos escritores ficcionistas espanhóis. Parodiou os romances de cavalaria que gozaram de imensa popularidade no período e, na altura, já se encontravam em declínio. Nesta obra, a paródia apresenta uma forma invulgar. O protagonista, já de certa idade, entrega-se à leitura desses romances, perde o juízo, acredita que tenham sido historicamente verdadeiros e decide tornar-se um cavaleiro andante. Por isso, parte pelo mundo e vive o seu próprio romance de cavalaria. Enquanto narra os feitos do Cavaleiro da Triste Figura, Cervantes satiriza os preceitos que regiam as histórias fantasiosas daqueles heróis de fancaria. A história é apresentada sob a forma de novela realista.
É considerada a grande criação de Cervantes. O livro é um dos primeiros das línguas européias modernas e é considerado por muitos o expoente máximo da literatura espanhola. Em princípios de maio de 2002, o livro foi escolhido como a melhor obra de ficção de todos os tempos. A votação foi organizada pelo Clubes do Livro Noruegueses e participaram escritores de reconhecimento internacional.[4]
Índice
1 Enredo
2 Análise
3 Interpretações e influências
4 Referências
5 Referências bibliográficas
6 Ligações externas
Enredo
Rota percorrida por D. QuixoteO protagonista da obra é Dom Quixote, um pequeno fidalgo castelhano que perdeu a razão por muita leitura de romances de cavalaria e pretende imitar seus heróis preferidos. O romance narra as suas aventuras em companhia de Sancho Pança, seu fiel amigo e companheiro, que tem uma visão mais realista. A ação gira em torno das três incursões da dupla por terras de La Mancha, de Aragão e de Catalunha. Nessas incursões, ele se envolve em uma série de aventuras, mas suas fantasias são sempre desmentidas pela dura realidade. O efeito é altamente humorístico.
Análise
D. Quixote e Sancho Pança (ilustração de Gustave Doré)O livro é estruturado em duas partes, a primeira maneirista, enquanto a segunda é mais barroca. Enquanto a primeira parte da obra deixa a impressão de liberdade máxima, a segunda parte produz a sensação constante de nos encontrarmos encerrados em limites estreitos. Essa sensação é sentida mais intensamente quando confrontada com a primeira parte. Se anteriormente, a ironia era, sobretudo, uma expressão amarga da impossibilidade de dar realidade a um ideal, com a segunda parte nasce muito mais da confrontação das formas da imaginação com as da realidade. Cervantes dá a sua própria definição da obra: "orden desordenada (...) de manera que el arte, imitando à la Naturaleza, parece que allí la vence". O processo adotado por Cervantes - a paródia - permite dar relevo aos contrastes, através da deformação grotesca, pela deslocação do patético para o burlesco, fazendo com que o burlesco apague momentaneamente a emoção, estabelecendo um entrelaçado espontâneo de picaresco, de burlesco e de emoção. O conflito surge do confronto entre o passado e o presente, o ideal e o real e o ideal e o social.
Dom Quixote e Sancho Pança representam valores distintos, embora sejam participantes do mesmo mundo. É importante compreender a visão irônica que o romancista tem do mundo moderno, o fundo de alegria que está por detrás da visão melancólica e a busca do absoluto. São mundos completamente diferentes. Sancho Pança o fiel escudeiro de Dom Quixote é definido por Cervantes como "Homem de bem, mas de pouco sal na moleirinha". É o representante do bom senso e é para o mundo real aquilo que Dom Quixote é para o mundo ideal. Por fim, a história também é apresentada sob a forma de novela realista: ao regressar a seu povoado, Dom Quixote percebe que não é um herói, mas que não há heróis.
Interpretações e influências
As figuras de D. Quixote, de Sancho Pança e do cavalo de Dom Quixote, Rocinante, rapidamente conquistaram a imaginação popular. No entanto, os críticos contemporâneos da obra não a levaram tão a sério como as gerações posteriores. No século XVII, por exemplo, considerou-se que o romance continha em si pouco mais que o tom de bom humor e de diversão, com Dom Quixote e Sancho Pança a encarnarem respectivamente o grotesco e o pícaro. O século XVIII foi pródigo em elogios a D. Quixote, não só na Espanha e em Portugal, como também por parte de grandes românticos do centro da Europa.
Na história do romance moderno, o papel de Dom Quixote é reconhecido como seminal. A evidência disso pode ser vista em Daniel Defoe, em Henry Fielding, em Tobias Smollett e Laurence Sterne e, também, em personagens criadas por alguns romancistas clássicos do século XIX, como é o caso de Walter Scott, de Charles Dickens, de Gustave Flaubert, de Benito Pérez Galdós, de Herman Melville e de Fiódor Dostoiévski. O mesmo acontece no caso de alguns autores pós-realistas do século XX, como James Joyce e Jorge Luis Borges. Dom Quixote provou ser uma notável fonte de inspiração para os criadores em outros campos artísticos. Desde o século XVII que se têm realizado peças de teatro, óperas, composições musicais e bailados baseados no Dom Quixote. No século XX, o cinema, a televisão e os cartoons inspiraram-se igualmente nesta obra. Dom Quixote inspirou ainda artistas como William Hogarth, Francisco Goya, Honoré Daumier e Pablo Picasso.
Dom Quixote
El ingenioso hidalgo Don Qvixote de la Mancha
Dom Quixote
Facsímile da primeira edição de Dom Quixote
Autor (es) Miguel de Cervantes y Saavedra
Título em Portugal Dom Quixote[1]
Título no Brasil Dom Quixote
País Espanha
Editor Francisco de Robles
Lançamento 1605
Edição portuguesa
Tradução anônimo[2]
Lançamento 1794
Edição brasileira
Tradução Almir de Andrade
Milton Machado[3]
Editora Livraria José Olympio Editora
Lançamento 1952
Dom Quixote de La Mancha (Don Quijote de la Mancha em castelhano) é um livro escrito pelo espanhol Miguel de Cervantes y Saavedra (1547-1616). O título e ortografia originais eram El ingenioso hidalgo Don Qvixote de La Mancha, com sua primeira edição publicada em Madrid no ano de 1605. É composto por 126 capítulos, divididos em duas partes: a primeira surgida em 1605 e a outra em 1615.
O livro surgiu em um período de grande inovação e diversidade por parte dos escritores ficcionistas espanhóis. Parodiou os romances de cavalaria que gozaram de imensa popularidade no período e, na altura, já se encontravam em declínio. Nesta obra, a paródia apresenta uma forma invulgar. O protagonista, já de certa idade, entrega-se à leitura desses romances, perde o juízo, acredita que tenham sido historicamente verdadeiros e decide tornar-se um cavaleiro andante. Por isso, parte pelo mundo e vive o seu próprio romance de cavalaria. Enquanto narra os feitos do Cavaleiro da Triste Figura, Cervantes satiriza os preceitos que regiam as histórias fantasiosas daqueles heróis de fancaria. A história é apresentada sob a forma de novela realista.
É considerada a grande criação de Cervantes. O livro é um dos primeiros das línguas européias modernas e é considerado por muitos o expoente máximo da literatura espanhola. Em princípios de maio de 2002, o livro foi escolhido como a melhor obra de ficção de todos os tempos. A votação foi organizada pelo Clubes do Livro Noruegueses e participaram escritores de reconhecimento internacional.[4]
Índice
1 Enredo
2 Análise
3 Interpretações e influências
4 Referências
5 Referências bibliográficas
6 Ligações externas
Enredo
Rota percorrida por D. QuixoteO protagonista da obra é Dom Quixote, um pequeno fidalgo castelhano que perdeu a razão por muita leitura de romances de cavalaria e pretende imitar seus heróis preferidos. O romance narra as suas aventuras em companhia de Sancho Pança, seu fiel amigo e companheiro, que tem uma visão mais realista. A ação gira em torno das três incursões da dupla por terras de La Mancha, de Aragão e de Catalunha. Nessas incursões, ele se envolve em uma série de aventuras, mas suas fantasias são sempre desmentidas pela dura realidade. O efeito é altamente humorístico.
Análise
D. Quixote e Sancho Pança (ilustração de Gustave Doré)O livro é estruturado em duas partes, a primeira maneirista, enquanto a segunda é mais barroca. Enquanto a primeira parte da obra deixa a impressão de liberdade máxima, a segunda parte produz a sensação constante de nos encontrarmos encerrados em limites estreitos. Essa sensação é sentida mais intensamente quando confrontada com a primeira parte. Se anteriormente, a ironia era, sobretudo, uma expressão amarga da impossibilidade de dar realidade a um ideal, com a segunda parte nasce muito mais da confrontação das formas da imaginação com as da realidade. Cervantes dá a sua própria definição da obra: "orden desordenada (...) de manera que el arte, imitando à la Naturaleza, parece que allí la vence". O processo adotado por Cervantes - a paródia - permite dar relevo aos contrastes, através da deformação grotesca, pela deslocação do patético para o burlesco, fazendo com que o burlesco apague momentaneamente a emoção, estabelecendo um entrelaçado espontâneo de picaresco, de burlesco e de emoção. O conflito surge do confronto entre o passado e o presente, o ideal e o real e o ideal e o social.
Dom Quixote e Sancho Pança representam valores distintos, embora sejam participantes do mesmo mundo. É importante compreender a visão irônica que o romancista tem do mundo moderno, o fundo de alegria que está por detrás da visão melancólica e a busca do absoluto. São mundos completamente diferentes. Sancho Pança o fiel escudeiro de Dom Quixote é definido por Cervantes como "Homem de bem, mas de pouco sal na moleirinha". É o representante do bom senso e é para o mundo real aquilo que Dom Quixote é para o mundo ideal. Por fim, a história também é apresentada sob a forma de novela realista: ao regressar a seu povoado, Dom Quixote percebe que não é um herói, mas que não há heróis.
Interpretações e influências
As figuras de D. Quixote, de Sancho Pança e do cavalo de Dom Quixote, Rocinante, rapidamente conquistaram a imaginação popular. No entanto, os críticos contemporâneos da obra não a levaram tão a sério como as gerações posteriores. No século XVII, por exemplo, considerou-se que o romance continha em si pouco mais que o tom de bom humor e de diversão, com Dom Quixote e Sancho Pança a encarnarem respectivamente o grotesco e o pícaro. O século XVIII foi pródigo em elogios a D. Quixote, não só na Espanha e em Portugal, como também por parte de grandes românticos do centro da Europa.
Na história do romance moderno, o papel de Dom Quixote é reconhecido como seminal. A evidência disso pode ser vista em Daniel Defoe, em Henry Fielding, em Tobias Smollett e Laurence Sterne e, também, em personagens criadas por alguns romancistas clássicos do século XIX, como é o caso de Walter Scott, de Charles Dickens, de Gustave Flaubert, de Benito Pérez Galdós, de Herman Melville e de Fiódor Dostoiévski. O mesmo acontece no caso de alguns autores pós-realistas do século XX, como James Joyce e Jorge Luis Borges. Dom Quixote provou ser uma notável fonte de inspiração para os criadores em outros campos artísticos. Desde o século XVII que se têm realizado peças de teatro, óperas, composições musicais e bailados baseados no Dom Quixote. No século XX, o cinema, a televisão e os cartoons inspiraram-se igualmente nesta obra. Dom Quixote inspirou ainda artistas como William Hogarth, Francisco Goya, Honoré Daumier e Pablo Picasso.
Assinar:
Postagens (Atom)